Lo más difícil de todo ha sido encontrar huevos blancos, en todos los supermercados sólo venden huevos marrones así que al final tuve que ir al mercado y en la pollería-huevería encontré los ansiados huevos blancos.
Para hacer los huevos mágicos se necesita:
-huevos blancos cocidos
-vinagre blanco
-colorante alimentario (yo lo utilizé en gel, aunque líquido también serviria)
-agua caliente
-una cera blanca
PASO A PASO
Primero cocemos los huevos y los dejamos enfriar.
Escribimos el nombre sobre el huevo con cera blanca que no se verá (aquí está el secreto)
En un vaso ponemos agua caliente, una cucharada de vinagre blanco y unas gotas de colorante. Removemos bien.
Sumergimos el huevo cocido dentro del vaso, más o menos tiempo dependiendo de la tonalidad que deseemos obtener. Y... voilà, aparecerá el nombre como por arte de magia
Sacamos el huevo y dejamos secar sobre papel de cocina.
Esta idea de los huevos mágicos la saqué de conbotasdeagua
Fue fantástico ver los ojitos de los niños cuando de repente apareció su nombre escrito en los huevos. Ver su carita de sorpresa no tuvo precio.
Además de escribir los nombres de los niños, también dibujamos estrellitas en los huevos.
Cuando miras los huevos parece que sean huevos de colores y que hayas escrito encima con tiza, pero no, al haberlo escrito antes con cera blanca no se borra.
Para hacer los huevos con sorpresa se necesita lo mismo que antes, pero ahora no son huevos duros, sino que antes de teñirlos los habremos vaciado.
PASO A PASO
Primero que todo hacemos un agujero al huevo de un tamaño suficiente para después meter cositas dentro y lo vaciamos.
Una vez vacíos los hervimos para esterilizarlos (porque después los rellenaremos con chocolates)
Los teñímos tal como se ha indicado anteriormente.
Y una vez secos se rellenan con lo que queramos. Nosotros en particular los hemos rellenado de lacasitos, bombones, pollitos, minihuevos de chocolate y un papel enrolladito con un mensaje.
Finalmente se tapa el agujero del huevo con una pegatina.
Esta idea de los huevos con sorpresa la he sacado de notmartha
Ha sido muy bonito decorar la mesa de la comida de Pascua, a parte de lo colorida que ha quedado, ha sido divertido romper los huevos y ver cada comensal los mensajes cariñosos que les habían puesto los niños, en especial dando las gracias a los padrinos por las monas que les habían regalado.
Me ha encantado hacer esta actividad, los niños se lo han pasado genial decorándolos y los huevos han quedado con unas tonalidades maravillosas.
El año que viene seguro que repetiremos.
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