Focaccia art

El arte de las focaccias es el nuevo boom de instagram, no sólo son bonitas sino que además están deliciosas.

Si hace unos meses quedé fascinada con el arte plasmado en tablas de quesos y embutidos, ahora estoy maravillada con los bouquets de flores que decoran las focaccias, es navegar por internet y alucinar con estas creaciones comestibles.

Así que me lanzado en este arte de las focaccias, primero es hacer la masa de la focaccia y luego ya viene la parte creativa, dar rienda suelta a la imaginación y transformar un simple pan en un maravilloso cuadro comestible.

Para decorar la focaccia puedes ultilizar los vegetales que quieras, hago una lista con unas sugerencias:
-tomates cherry , si son de colores pues mejor
-pimientos de colores (verde, amarillo, rojo)
-tomates (con la piel se puede hacer una rosa)
-aceitunas negras y verdes
-alcaparras
-espárragos
-perejil
-cebollino
-champiñones
-romero
-pipas de calabaza
-ajos tiernos

He hecho dos focaccias una decorada con girasoles y otras con un bouquet de flores.

INGREDIENTES para la masa de focaccia
-500 gr harina de fuerza
-50 ml de aceite de oliva
-25 gr de levadura fresca de panadero
-300 ml de agua
-1 cucharadita de sal

-aceite de oliva
-escamas de sal o sal gruesa

Para la decoración:
-1 pimiento amarillo
-aceitunas negres
-aceitunas verdes
-tomates cherry
-1 tomate
-1 cebolla morada
-espárragos verdes
-cebollino
-perejil
-alcaparras

La receta es para una focaccia grande. Yo hice dos focaccias, por lo que doblé los ingredientes.

Disolver la levadura con un poco de agua templada y una cucharadita de harina. Lo dejamos reposar unos 10 minutos.
En un bol poner la harina, el aceite, la sal y la mezcla de la levadura y amasar.
Ir añadiendo el agua poco a poco y seguir amasando hasta conseguir una masa elástica.

Untar con aceite un bol y poner la bola de masa. Cubrir el bol con un paño limipio y dejar reposar unas 2 horas en un lugar templado y sin corriente (como dentro del horno apagado) hasta que doble su tamaño.
Poner papel de hornear sobre un bandeja de horno y untarla de aceite, verter la masa y extenderla por toda la bandeja  (también lo podéis poner directamente sobre la bandeja pero para desmoldarlo va mejor el papel de hornear).
Dejar levar, o bien la dejas levar un par de horas más tapado con un paño y en un lugar templado o bien lo cubres con film y la dejas en la nevera toda la noche (para acortar procesos podéis hacer la masa por la noche y al día siguiente hornearla)
Hecho ya el segundo levado, ponemos un poco de aceite sobre la masa, humdimos los dedos por toda la masa haciendo unos agujeritos, espolvoreamos escamas de sal y llega ya el momento de la decoración, ¡el momento de dar rienda suelta a la imaginación!
Para que sea más rápido el proceso de decoración es mejor que tengáis ya las aceitunas negras cortaditas en trocitos pequeños, el pimiento amarillo cortado en tiritas y los cherrys partidos por la mitad, todos los ingredientes preparados para decorar el pan.
Una focaccia la decoramos como si fueran girasoles, primero ponemos el cebollino de tallo, las tiritas de pimiento amarillo como si fuera el girasol y en el centro ponemos aceitunas negras cortadas en trocitos pequeñitos.
Con otro cebollino hacemos una planta decorada con cherrys partidos por la mitad.
Y para acabar de decorar ponemos más tiras de cebollino con alcaparras.
La segunda focaccia la decoramos como si fuera un jardín de flores, para los tallos alternamos espárragos verdes y cebollino, una flor la hacemos con un corte de cebolla morada, una rosa la hacemos con la piel de tomate enrollada, otras flores con tiras de zanahoria enrolladas, otra planta con tomates cherry partidos por la mitad, una planta con cebollino y mitades de aceitunas verdes y la tierra la hacemos con champiñones.
Antes de honear, pincelar con aceite las verduras para que no se quemen al hornearse, incluso podéis poner un poco de escamas sobre los cherrys o los champiñones para que queden más sabrosos.
Horner unos 22 minutos a 200º. Debe quedar crujiente por fuera y con una miga esponjosa por dentro.
Servir templada, es una delicia.

Si os sobra focaccia, la guardáis tapada en la nevera y cuando la queráis volver a consumir meterla en el horno unos minutos y volveréis a disfrutar de todo su sabor.