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lunes, 30 de noviembre de 2020

Calendario de adviento corona de eucalipto

De todos los calendarios DIY que he hecho éste es uno de los más bonitos, minimalista y además es un dos en uno, por un lado está el calendario de adviento y por otro una corona navideña de eucalipto que lucirá durante todas las fiestas.

Para que no quedase muy recargado con paquetitos, he hecho sobrecitos de cartulina con las actividades o vales para cada día.
No aconsejo colgar sólo etiquetas que por un lado esté el número del día y por atrás escrita la actividad, porque en un día los niños han mirado todas las sorpresas del mes y se pierde la gracia. 
Al menos que cada día tengan que abrir el sobre y sea un mes muy emocionante.
En la mayoría de días hay actividades o vales para cenas especiales, pero algunos días también tendrán un bombón. 
Como es evidente no estará colgado, sólo encontrarán la palabra y lo tendrán que ir buscando por toda la casa, ¡más intriga aún si cabe!
Y después del día 24, nos quedará una minimalista y preciosa corona de eucalipto que no puede estar más de moda.
Está en la habitación y adorna un montón, ¡qué ganas de hacer más coronas!
Lo más laborioso es pensar qué poner cada día y hacer los papelitos del calendario, pero hacer la corona es sencillísimo.

MATERIALES
-aro dorado
-eculalipto
-cinta para colgar la corona
-adorno navideño
-hilo de pescar
-cartulina
-números, yo los decargué de pinterest, tenéis el enlace aquí
-rotuladores
-washi tape
-pegamento
-tijeras
-perforadora
-hilo
Cortar la cartulina en rectángulos, en el centro por un lado enganchar el número y por el otro escribir la actividad/vale...
Doblar los laterales de la cartulina hacia dentro y enganchar con un poco de washi tape
Con la perforadora hacer un agujero en la parte superior del número

Hacer la corona de eucalipto es de lo más sencillo, se hace en un momento

Enrollar el eucalipto por el aro, el eucalipto es muy flexible, y anudar el extremo con hilo de pescar.
En la parte inferior poner un adorno navideño, yo puse un ramillete de piña y acebo. Anudarlo con hilo de pescar
En la parte superior atar una cinta para poder colgar la corona.
Con hilo blanco atar cuatro sobrecitos pasando el hilo por los agujeros y anundando cada uno. Haremos 6 tiras de unos cuatro sobres cada uno, podéis hacer alguna más larga, otra más corta... dejando más o menos separación al anudar cada sobrecito, así quedará a diferentes niveles.
Finalmente atamos cada tira a la parte inferior del aro, por detrás del eucalipto para que no se vean los nudos
Y ya está lista la corona navideña con calendario de adviento incluido, sólo queda colgarla en un lugar del salón o habitación y que luzca todas las Navidades.

Si queréis más ideas sobre calendarios de adviento, os pongo los enlaces de los de los años anteriores con botecitoscon paquetitoscasitas kraften azul y blanco y en rojo y blanco

¡Que empiece la cuenta atrás!

martes, 17 de noviembre de 2020

Red velvet

Hacía mucho tiempo que tenía ganas de hacer la tarta red velvet, la habíamos comido varias veces pero nunca me había atrevido por el tema del colorante y porque me daba la sensación de que llevaba muchos ingredientes, ¡qué equivocada estaba!, mucho más fácil de lo que parece.
Mis hijos hacía mucho tiempo que me la pedían y al final se la he preparado
INGREDIENTES
Para el bizcocho
-300 gr de harina de trigo
-2 huevos L
-300 gr de azúcar
-120 ml de aceite de girasol
-2 cucharaditas de extracto de vainilla
-2 cucharadas de cacao en polvo
-250 ml de leche
-2 cucharaditas de zumo de limón
-1 cucharadita de bicarbonato de sodio
-2 cucharaditas de vinagre blanco
-1 cucharadita de colorante en pasta rojo.

Para el frosting:
-400 gr de queso philadelphia
-100 gr de mantequilla
-250gr de azúcar glas
ELABORACIÓN
Para hacer el bizcocho empezar preparando un buttermilk casero, mezclando el limón con la leche. Dejar reposar durante unos 10 minutos.
En un bol, batir los 2 huevos hasta que espumen un poquito.
Añadir el azúcar y seguir batiendo un minuto aproximadamente.
Añadir el aceite y el extracto de vainilla y mezclar.
Tamizar la harina y el cacao a la vez y mezclarlo con la mezcla anterior.
Añadir el buttermilk, sabremos que está listo al ver que se han formado unos grumitos en la leche.
Mezclar a velocidad baja.
Disolver el bicarbonato de sodio con el vinagre para activar el bicarbonato y verterlo sobre la masa.
Y para conseguir un rojo intenso utilizar el colorante Red Extra de Sugarflair (con otros colorantes necesitaréis más cantidad sin obtener ese rojo tan intenso)
Una vez la masa esté lista, verterla en dos moldes de 20 centímetros de diámetro desmoldables  previamente engrasados con spray anthiadherente y hornearlo a 165º una media hora o hasta que al pinchar con un palillo salga limpio.
Una vez horneados, dejar reposar unos 10 minutos sobre una rejilla.

Para el frosting batir la mantequilla a temperatura ambiente hasta que blanquee, y añadir el azúcar glas tamizado.
Cuando estén integrados, añadir el queso philadelphia y batir.


Para montar la tarta, primero nivelar los dos bizcochos.
Sobre una base de cartón poner un bizcocho, poner crema, el otro bizcocho y cubrirlo todo de una fina capa de crema que hará de tapamigas.
Dejar enfriar en la nevera.
Poner una generosa capa de crema y con la ayuda de una espátula ir alisándolo.
En la parte superior de la tarta, con la ayuda de una manga pastelera, hacer unas montañitas con el frosting.
Con los restos de bizcocho que nos han sobrado al nivelarlos, rallarlos y espolvorear por encima y el contorno inferior de la tarta.
Una delicia!

martes, 10 de noviembre de 2020

Fault line cake

Cada temporada tiene una moda en tartas, si primero fueron las de fondant, después las drip cake, seguido de las tartas de letras o números, la última tendencia son las fault line cake o tarta de línea fracturada.

Así que siguiendo la última tendencia he hecho mi primera fault line cake, una tarta muy vistosa con una línea central como si la tarta se hubiera roto.


Cuanto más alta sea la tarta, más llamativa quedará y más lucirá la línea fracturada.

Yo hice dos carrot cakes y los cubrí con el frosting de crema de queso, tenéis la receta en este enlace

En la primera capa del frosting enganché a media altura los sprinkles con la mano, hacedlo con cuidado porque se caerán mucho.

Con una manga pastelera, cubrí con la crema de queso por encima y debajo de la línea de sprinkles. Debe quedar más gruesa que la línea central.

Con una espátula ir alisándolo todo con cuidado.

Llevarla a la nevera para que la capa externa se solidifique y se puedan pintar mejor las líneas doradas con colorante dorado en polvo o pintura dorada.

Pintamos los bordes de la línea fracturada con pintura comestible dorada y si ha quedado algún hueco en la línea fracturada la rellenamos con más sprinkles.

La parte superior la he decorado con frosting de crema de queso, sprinkles y bolas de chocolate de colores.

La dificultad está en enganchar los sprinkles, aunque más que dificultad es un poco de paciencia para que quede todo bien puesto.
Pero queda tan llamativa que es el centro de cualquier gran fiesta.

Espero que os animéis a probarla.


miércoles, 4 de noviembre de 2020

Empanadillas calabaza

Este año he decorado la casa de otoño con calabazas decorativas, son tan bonitas!! Me encantan los colores otoñales y todo lo relacionado con esta estación: las castañas, los boniatos, los panellets y las calabazas en todas sus variedades.

¡Enamorada estoy de las calabazas! incluso las empanadillas les he dado esta forma para la noche de Halloween.

Lo ideal hubiera sido que el relleno fuera también de calabaza, pero con niños en casa triunfaban mucho más si estaban rellenas de atún y huevo.
Lo importante es tener un cortador de galletas en forma de calabaza para convertir una simple empanadilla en una de graciosa.

INGREDIENTES
-obleas para empanadilla (tamaño grande)
-2 huevos
-4 latas de atún
-1 cebolla
-tomate frito
-1 huevo para pintar

ELABORACIÓN
Cocemos 2 huevos unos 10 minutos, una vez cocidos los pasamos por un chorro de agua fría y los pelamos.
En una sartén pochar la cebolla, cuando esté transparente añadir el atún bien escurrido. Lo dejamos freir un poco, añadimos el tomate frito y lo mezclamos bien.
Incorporar el huevo duro picado y lo integramos.
Cortar todas las obleas para empanadilla con el cortador de galletas en forma de calabaza.
Poner relleno en el centro de la oblea, cubrirla con otra oblea y apretar los bordes con los dedos.
Sellar con un tenedor los bordes para que no se escape el relleno al hornearlo y pintar con huevo batido
Honear a 180º hasta que la empanadilla esté dorada.

¿Os gustan tanto las calabazas como a mí? Ya sean comestibles o de decoración, que en otoño no falten!